Fractura de clavícula

Las fracturas de clavícula se suelen producir en pacientes jóvenes a causa de actividades deportivas o accidentes de tráfico.También se puede presentar en niños, en lactantes, y en recién nacidos a raíz de maniobras obstétricas.

El tratamiento más común es el tratamiento conservador o no quirúrgico, generalmente mediante cabestrillo u otro sistema de inmovilización.

Su traumatólogo le informará en caso de que sea necesario realizar una intervención en su fractura de clavícula, que se realizaría reduciendo la fractura y colocando una placa con tornillos que asegura su reducción hasta la consolidación.

A través de controles clínico-radiológicos, su traumatólogo podrá ver e informarle de la evolución de la fractura hasta su curación.

Fracturas del codo

Las fracturas del codo suelen ser muy complejas, de modo que se requiere un gran conocimiento en el manejo de estas lesiones tanto en niños como en adultos.

Fracturas del codo del niño

Las fracturas del codo del niño (fracturas supracondíleas) pueden ser tratadas de manera conservadora (sin operar) siempre que no estén desplazadas, y se optará por la opción quirúrgica en aquellas que estén desplazadas.

El traumatólogo de guardia le informará del tipo de fractura y del tratamiento más indicado.

Cuando se realiza una intervención, normalmente se estabiliza la fractura por medio de agujas, que se deberán retirar a las seis semanas. Durante ese tiempo, el brazo estará inmovilizado con una férula durante 2/3 semanas (según el caso) y a continuación pasará a una inmovilización más suave que permitirá cierto grado de movilidad del codo. A partir de las seis semanas se retirarán las agujas y se dejará el codo libre.

Cuando se realiza un tratamiento conservador, la pauta de inmovilización es más o menos la misma que la quirúrgica, pero sin la necesidad de intervención.

Fracturas del codo del adulto

Por lo general son siempre quirúrgicas. En raras ocasiones se decide tratarlas de manera conservadora (no quirúrgica).

La intervención se realiza mediante osteosíntesis con placas conformadas, que se adaptan a la anatomía de la región. Este tipo de fracturas son complejas y con frecuencia dejan cierto grado de secuela, por lo que requieren de un cirujano con gran conocimiento de la región.

En paciente de edad avanzada y con gran afectación de la zona articular, puede ser necesaria la utilización de una prótesis de codo si la reconstrucción se hace imposible.